Otras actividades
El Belén y el belenismo es un marco muy amplio, con múltiples contenidos y posibilidades de trabajo y de investigación. Serafín Rodríguez, profesor de Arte, fotógrafo y director del taller de fotografía del colegio Auseva, realiza con la investigación y la cámara fotográfica trabajos audiovisuales tan interesantes como Las figuras del Belén de Salcillo; Colecciones de Belenes en Oviedo; Fachada del Nacimiento en el templo de la Sagrada Familia, de Gaudí; El Belén Napolitano; Belenes de cumbres…
En los últimos años, ya dentro de la Navidad, la Asociación Belenista de Oviedo ha dedicado un día a ver belenes con socios y amigos. La Jornada Belenista ha seguido cada año una ruta por distintas zonas: Gijón y sus alrededores; el Oriente de Asturias; el Concejo de Avilés; Comarca occidental de Asturias; Valladolid… Se ha visto belenes emblemáticos como el de Lastres; con tradición, como el la Asociación de Gijón o del Sanatorio Marítimo; interesantes como el de La Caridad o La Pedrera… Un día en que se comparte y se disfruta viendo y aprendiendo de lo que otros hacen.
La tradición de poner el Pesebre en el mundo se remonta al año 1223, en una Navidad de la villa italiana de Greccio. En esta localidad, San Francisco de Asís que siempre había sentido un amor especial por la Navidad recibió esta inspiración del Señor.
Se acercaba Nochebuena y decidió representar la humildad del pesebre tal como sucedió en Belén. Y así lo hizo en la noche de Navidad. La gente del pueblo se acercó con antorchas encendidas a la gruta que Francisco y sus amigos habían preparado. Todos los asistentes pudieron alabar al recién nacido en ese pobre pesebre, mientras los ángeles entonaban alabanzas y cantos: tal como sucedió en Belén.
Desde aquel día, se celebra Nochebuena, imitando la inspiración de San Francisco de Asís, en torno a un humilde pesebre que recibe al Hijo de Dios. El Papa Juan Pablo II, en 1.986, a petición de las asociaciones belenistas de todo el mundo, proclamó a San Francisco de Asís Patrono Universal del Belenismo.
Esta actividad ha sido suprimida en los últimos años. Dentro de la Semana Belenista, cada año se hacía una Ofrenda floral a San Francisco, Patrono de los belenistas, en la imagen del santo, situada en el Campo de San Francisco. Solía estar acompañada del sonido de las gaitas y de villancicos.